Hola Natur Lovers!
Hace algunos miles de años, más de 5.000 años según parece, alguien dibujó un precioso ciervo en un covacho o abrigo cerca de Radiquero, concretamente, en el abrigo de Chimiachas. Y hoy en día, se le conoce como el Ciervo de Chimiachas o el Ciervo de Guara.
Según indica la mesa de indicación que nos encontramos cerca del abrigo de Chimiachas, esta impresionante pintura rupestre es: "un pequeño ciervo, trazos y marcas hechas con los dedos (digitaciones). Fueron realizadas hace al menos 5.000 años con pigmentos de color rojo, obtenidos a partir del óxido de hierro, presente en vetas de la propia roca caliza".
Hoy no hemos ido a visitar esta preciosa obra rupestre, que, por cierto, os la recomendamos encarecidamente. Podéis encontrar muchísima información sobre ésta y otras pinturas rupestres que se encuentran en esta zona de la Sierra de Guara, en el
Parque Cultural del Río Vero. Programan visitas guiadas apto para todas las edades muy interesantes con unos guías muy majos. ¡Os llevarán a la prehistoria en unos parajes espectaculares!
Pero, nos hemos acordado mucho del Ciervo de Chimiachas por lo siguiente:
De ruta cerca de Alquézar, hemos realizado un paseo por los olivos y almendros que acompañan a Radiquero, algunos de unos cientos de años, y de pronto hemos visto al protagonista del día: ¡un precioso corzo!
Muy pausadamente, nos hemos agachado y hemos podido disfrutar de su presencia durante un buen rato. Estaba comiendo las frescas gramíneas que por estas fechas están enormes por la primavera tan húmeda que hemos tenido este año.
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Corzo en Radiquero-Alquézar, Sierra de Guara |
Nos han venido pensamientos fugaces: ¿Será descendiente de aquellos "ciervos" que vivían hace más de 5.000 años atrás, como el ciervo de Chimiachas? Sólo el plantear la posibilidad nos provoca una gran emoción y respeto hacia él.
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Corzo en Radiquero, Alquézar. Fauna de la Sierra
de Guara |
Admirable y esquibo, este joven corzo seguía alimentándose tranquilamente sin darse cuenta de nuestra cercana presencia. Mientras, nosotros hemos podido retratarlo y disfrutar, otro día más, de la espectular fauna que disponemos al lado de casa, en la Sierra de Guara.
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Dime, ojazos: ¿Eres familiar lejano del "ciervo" de Chimiachas...? |
Al rato, se ha adentrado poco a poco en la espesura de un quejigal y nosotros hemos vuelto silenciosamente sobre nuestros pasos, ¡emocionados del momentazo que nos ha dado!
¡Muchas gracias, amigo!